Sochi 2014, los JJOO con presupuesto ilimitado

Dentro de menos de un año se celebrarán en la localidad de Sochi los vigésimosegundos JJOO de invierno, concretamente del 7 al 23 de febrero de 2014. Será la primera vez que Rusia acoja unas olimpiadas de invierno.

Desde el momento en que la ciudad se presentó como candidata saltó la polémica, que abarcaba tanto la vulneración de los derechos de los trabajadores (como recoge The Guardian), como la oposición de los ecologistas, las expropiaciones impagadas a habitantes de la localidad, e incluso las acusaciones de corrupción y malversación de caudales públicos.

La semana pasada El Periódico incluía una crónica escrita por Ander Mirambell, quien escribía, con conocimiento de causa sobre Sochi al haber participado en una competición de skeleton allí. Su titular era explícito: “Sochi 2014 patina”, y explicaba todas las deficiencias con las que se encontró: controles agobiantes, habitación de hotel sin cama, tobogán sin hielo…

Seguramente todas estas deficiencias serán subsanadas y dentro de un año los JJOO serán un éxito, gracias, sin duda, al mayor prepuesto de la historia: más de 50.000 millones de dólares, cuando el presupuesto inicial era de apenas 10.600 millones de dólares. Numerosas voces se han alzado en contra de este dispendio, como Serguéi Aleksashenko, director de investigaciones macroeconómicas de la Escuela Superior de Economía de Moscú, para quien “Los JJOO tendrán un efecto marginal por lo que respecta a la llegada de turistas. La experiencia demuestra que casi nunca se compensan los Juegos Olímpicos de invierno para los organizadores, y es imposible recuperar una inversión tan elevada”.

El coste de los JJOO de Sochi será por lo menos diez veces mayor que cualquiera de las anteriores olimpiadas de invierno, pero Alexander Zhukov, presidente del Comité Olímpico de Rusia, está convencido de que las inversiones en Sochi ya han tenido el esperado “impacto económico”. Unas declaraciones sorprendentes.

Aquí tenéis un video que trata de las bondades del proyecto. ¡Juzgad vosotros mismos! 

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